Las Repúblicas del Perú y Chile sostienen un diferendo
diplomático sobre la soberanía de una zona marítima de aproximadamente 37,900
kms2 en el Océano Pacífico.
Para Chile no existen temas limítrofes pendientes con
el Perú, ya que los límites marítimos han sido definidos en 1952 y 1954 cuando
ambos países suscribieron Convenios de pesca donde se especificaban claramente
las fronteras marítimas.
Para el Perú, el límite marítimo con su vecino del sur
no está definido ya que nunca se ha firmado un Tratado que establezca dicho
límite.
Para Chile, la frontera marítima con el Perú es la
línea del paralelo (línea azul), lo que deja sin mar a las provincias peruanas
del sur.
El Perú, considera que le correspondería seguir una
prolongación de sus costas (línea verde), pero que eso no sería justo para
Chile. Lo justo y equitativo para ambos países sería trazar una línea media
(línea roja) para definir la frontera entre ambos países.
HISTORIA DE LA CONTROVERSIA
Este conflicto tiene sus inicios en el siglo XIX cuando
el mapa de Sudamérica era diferente y Chile era un pequeño pero próspero país,
que explotaba recursos minerales en suelo boliviano con el apoyo de capitales
ingleses. En 1879 el gobierno de Bolivia decidió elevar en 10 centavos los
impuestos a cada quintal de salitre extraído de su territorio y exportado por
una empresa chileno-británica. En represalia, Chile invadió Bolivia y le
declaró la guerra.
Perú trató de mediar en el conflicto, pero Chile
también le declaró la guerra al Perú, debido a que el Perú tenía una alianza
militar con Bolivia.
La guerra tomó por sorpresa a Bolivia y Perú, quienes
se encontraban en clara desventaja militar frente a Chile. Bolivia no tenía
armada ni Ejército y tras un año de enfrentamientos se retiró de la guerra,
dejando al Perú solo contra Chile.
Luego de cuatro años de guerra, Chile venció al Perú y
extendió sus fronteras hasta sus actuales límites, apropiándose de las
provincia boliviana de Antofagasta y las provincias peruanas de Tarapacá y
Arica. También ocupó la ciudad de Lima por cuatro años y la provincia de Tacna
por 50 años. Bolivia perdió su acceso al mar.
Entonces, Chile emprendió una política de
"chilenización" de las provincias peruanas y bolivianas, expulsando a
familias que habían habitado la zona por cientos de años y colocando en su
lugar a colonos chilenos, en lo que se denominó "chilenización".
Sólo de la ciudad de Iquique fueron expulsados 40,000
peruanos y sus propiedades fueron confiscadas por el gobierno chileno. Los
pobladores que se negaban a dejar su ciudad eran hostilizados y amenazados de
muerte y sus nombres eran publicados en "actas de defunción" en los
diarios.
De esta forma, Chile tomó posesión no sólo de una
importante extensión territorial, sino también de enormes depósitos salitreros,
guaneros y cupríferos, así como de extensos recursos marinos que contribuyeron
decisivamente a su actual riqueza económica.
Ya que el Perú se negaba a rendirse, Chile apresó al
presidente peruano y lo retuvo en territorio chileno hasta que se firmó el
Tratado de Ancón, que puso fin a la guerra en 1883 y por el cual Chile
incrementó su territorio, avanzando del paralelo 24 hasta el paralelo 18. En
ese Tratado, así como en el complementario Tratado de Lima de 1929 se
determinan las nuevas fronteras terrestres, pero no existen referencias sobre
las fronteras marítimas entre Chile y Perú.
En 1947, tanto Chile como Perú proclaman
unilateralmente, que sus respectivos Estados poseen sobería sobre los mares
adyacentes a las costas de sus territorios.
PRINCIPALES ARGUMENTOS CHILENOS
Desde 1952, el Perú reconoce que la frontera marítima
con Chile es la línea del paralelo, y lo ha hecho a través de diversos
documentos. Además, desde la Guerra del Pacífico, en el siglo XIX, Chile ejerce
soberanía y control en toda el área que el Perú está reclamando.
En 1952 Chile, Ecuador y Perú suscriben la
"Declaración de Zona Marítima" en Santiago de Chile, por la que
establecen el reconocimiento de las 200 millas náuticas de cada país, cuya
definición corresponde a un minuto de arco sobre el paralelo de la línea del
Ecuador.
En 1954, Chile, Ecuador y Perú deciden firmar un nuevo
documento, llamado "Convenio sobre Zona Especial Marítima", debido a
que "se producen con frecuencia de modo inocente y accidental, violaciones
de la frontera marítima entre los Estados vecinos", situaciones que se
intentan regular y para lo cual "establécese una zona especial, a partir
de las 12 millas marinas de la costa, de 10 millas marinas de ancho a cada lado
del paralelo que constituye el límite marítimo entre los dos países".
En 1955, el gobierno del Perú, en la resolución Nº 23,
afirma que la zona marítima peruana está "limitada en el mar por una línea
paralela a la costa peruana y a una distancia constante de ésta, de 200 millas
náuticas" (punto 1) y que, de conformidad "con el inciso IV de la
Declaración de Santiago, dicha línea no podrá sobrepasar a la del paralelo
correspondiente al punto en que llega al mar la frontera del Perú" (punto
2).
En 1955, el Congreso del Perú ratifica los acuerdos de
1952 y 1954 (y otros acuerdos y convenios relacionados).
Según la posición chilena, los acuerdos de 1952 y 1954
tienen la naturaleza de un Tratado Internacional, se basan para ello en la
Convención de Viena de 1980, que si bien no tiene efectos retroactivos, están
reconociendo un derecho internacional consuetudinario.
La Convención de Derecho del Mar indica que los
acuerdos previos vigentes entre los Estados y, además, la existencia de
derechos históricos, priman por sobre el establecimiento de la línea media
contemplada por la misma convención y desde hace más de 50 años, en la
práctica, Chile ha ejercido soberanía en el espacio marítimo reclamado por
Perú, deteniendo a los buques pesqueros peruanos que han cruzado el paralelo.
PRINCIPALES ARGUMENTOS PERUANOS
El Perú no reconoce los acuerdos pesqueros de 1952 y
1954 como tratados de límites marítimos.
En 1982, las Naciones Unidas aprueban la Convención
sobre el Derecho del Mar (Convemar) llamada, la Constitución de los Océanos. La
Convención del Mar establece que en ausencia de tratados formales, el método
para establecer los límites marítimos es el trazo de una línea media y la
aplicación del principio de la equidad. Según la posición peruana, Chile y
Perú, nunca han firmado un Tratado específico de límites marítimos y Chile
pretende imponer un límite marítimo tremendamente inequitativo.
La Declaración de Zona Marítima de 1952, firmada por
delegados de Chile, Ecuador y Perú, define como zona marítima de cada uno de
los países las 200 millas medidas desde la costa. Perú sostiene que debido a
las características de la costa del Pacífico, las 200 millas de Chile se
sobreponen a las 200 millas del Perú. Si como Chile exige, se considerara al
paralelo como límite, la ciudad peruana de Camaná solo tendría 100 millas de
mar territorial, Mollendo sólo tendría 80 millas, Ilo 40 millas, Sama 20 millas
y Tacna no tendría mar, pues tendría 0 millas en el punto de la Concordia.
Para el Perú, el acuerdo de 1954, firmado por delegados
de Chile, Perú y Ecuador, denominado "Convenio sobre Zona Especial
Fronteriza Marítima", sería sólo un convenio de pesca y no un tratado de
límites. Sólo por error los negociadores habrían mencionado límites marítimos,
que no se encontrarían definidos por tratado alguno.
La Convención de Viena sobre el Derecho de los
Tratados, señala que no puede tomarse un acuerdo internacional, usándolo en
otro sentido: "Un tratado deberá interpretarse de buena fe conforme al
sentido corriente que haya de atribuirse a los términos del tratado en el
contexto de estos y teniendo en cuenta su objeto y fin".
Situación Actual
En la práctica Chile sigue ejerciendo soberanía en el
espacio marítimo reclamado por Perú, por lo cual la Armada chilena, en los
casos que buques pesqueros peruanos cruzan el paralelo, procede en la forma
habitual (detención, traslado hasta el puerto de Arica, confiscación de los
productos obtenidos, imposición de una sanción pecuniaria y la deportación al
Perú).
El 23 de mayo de 1986, el Perú solicitó a Chile
establecer el límite marítimo entre ambos países, bajo la premisa que aún no se
ha celebrado un Tratado especifico de delimitación marítima. Para el Perú,
todos los acuerdos anteriores, son apenas convenios de pesca, ante lo cual Chile
respondió que los acuerdos de 1952 y 1954 constituyen tratados de límites
marítimos entre ambos países.
Perú ha solicitado llegar a un entendimiento pacífico
usando los mecanismos bilaterales, como la Comisión Mixta Permanente de
Límites, Chile respondido que la frontera marítima ya está definida.
Finalmente el Perú ha decidido presentar el diferendo
ante la Corte Internacional de La Haya, en virtud a que Chile y Perú
suscribieron el Tratado Americano de Soluciones Pacíficas (Pacto de Bogotá) de
1948, que establece que si no existe voluntad de las partes, y no habiéndose
convenido un procedimiento arbitral, cualquiera de los Estados parte tienen
derecho a recurrir a la Corte Internacional de Justicia, existiendo competencia
obligatoria de ésta, tratándose controversias de orden jurídico que verse,
entre otras, sobre la interpretación de un tratado y cualquier cuestión de
Derecho internacional (artículo XXXI y XXXII del Pacto de Bogotá de 1948, en
concordancia con el artículo 36 del Estatuto de la Corte Internacional de
Justicia).
Fuente: http://www.adonde.com/historia/2007controversia_peru_chile.htm